jueves, 2 de febrero de 2012

Cuentos mínimos

Había una vez un pollito inglés

que se fue a Francia y se volvió francés.

Este es el cuento de un soldado

que no empezó y ya está acabado.

Esta es la historia de un saltamontes

que salta y baila y siempre se esconde.

¿Sabes tú dónde?

Había una vez un molinero

que molía con esmero,

día y noche sin parar,

para que así el panadero

pudiera hacer pan.

En la ladera de una monte

vivía un guapo cerdito,

José Tomás se llamaba

y era muy lindo y bonito.

Un ratoncito iba por un descampado

y este cuentecito se ha acabado.

1 comentario:

  1. ¡¡esta entrada es genial!! No se si tomarmela como cuentos mínimos o incluso como chistes algunos de ellos. Son graciosos, divertidos y sin sentido. A los niños les encantará.

    En el blog predominan los colores suaves, que ayudan a la concentración, bien estructurado y destacados los títulos.

    Espero que hayas disfrutado trabajando en el blog.

    Raquel Gómez Cabrerizo

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